Los sicarios Jonathan Mézquita Ávalos y Óscar Miguel López Tobilla lograron un acuerdo con la familia de su víctima Ema Gabriela Molina Canto para testificar en contra de Martín Medina Sonda, por lo que se les fijará una sentencia de 18 años de prisión por haber asesinado con arma blanca a la activista. La sentencia se les redujo nueve años.
Los inculpados fueron detenidos cuando pretendían darse a la fuga tras el homicidio, cuando estaban a punto de abordar un autobús para dejar Yucatán.
En la audiencia los dos presuntos homicidas aseguraron que fue “por órdenes de un alto político que está preso en Villahermosa, Martín Medina Sonda, que cometieron el crimen”.
Ante los informes y la disposición de “colaborar” con las autoridades investigadoras, la parte acusadora convino con la defensa y los aprehendidos un “procedimiento abreviado”, que de entrada concede un tercio de la reducción de la condena a imponer de acuerdo con la gravedad del delito.
Los acusados solicitaron más protección a las autoridades penitenciarias porque temen por su vida por su relación al proceso y a las pruebas otorgadas ayer, petición que el juez concedió favorable.
Las partes, Fiscalía, acusados y la víctima indirecta, acordaron la sentencia máxima a cambio de la información en contra de Medina Sonda, por lo que hoy martes se realizará el procedimiento abreviado, del cual podría emitirse el castigo.
Martín Medina Sonda, preso en Tabasco por multimillonario desfalco al gobierno de esa entidad, habría maquinado el homicidio de su ex esposa para quedarse con la custodia de sus dos hijos, quienes presenciaron cómo asesinaron a su madre. Con este ‘arreglo’, se hunde más el ex empresario, a quien se daría la pena máxima por feminicidio.
Fuente: La Jornada Maya
