Una nueva caravana de mil migrantes centroamericanos ingresó hoy en el Puente Internacional Rodolfo Robles en la frontera México-Guatemala.

Los indocumentados se apostaron desde ayer sobre el recinto binacional a la espera de ser atendidos por las autoridades mexicanas.

Sin embargo, funcionarios del Instituto Nacional de Migración (INM) informaron a los migrantes que el programa de tarjetas por razones humanitarias había concluido.

Sobre el puente los centroamericanos se organizaron y decidieron avanzar a territorio nacional.

Al verse rebasados por los migrantes, las autoridades optaron por dejarlos pasar y les abrieron los portones hacia el lado mexicano.

Sobre el puente Rodolfo Robles un migrante murió presuntamente de una convulsión.

Enseguida el contingente decidió seguir su camino hacia Tapachula.

La Policía Federal (PF) y el INM intentaron frenar la Caravana en el Municipio de Frontera Hidalgo.

Los migrantes respondieron con pedradas al operativo de las autoridades. Varios vehículos resultaron dañados y al menos una veintena fue detenida.

En esa localidad las autoridades también fueron rebasados y permitieron el avance de los extranjeros.

El domingo, un grupo de 200 migrantes que también ingresó de manera ilegal al País fue asegurada por el INM y la PF.