El matador de toros peruano Andrés Roca Rey continúa ingresado en el Hospital Country 2000 recuperándose de las heridas sufridas el pasado domingo en la Nuevo Progreso de Guadalajara. Tras ser intervenido quirúrgicamente el pasado lunes para reparar la pérdida de dos piezas dentales, la evolución está siendo muy satisfactoria. Los cirujanos maxilofaciales procedieron a la reconstrucción de la encía para poder colocar dos dientes provisionales hasta que pasado un tiempo de recuperación de cuatro meses aproximadamente, puedan realizarse implantes definitivos. A fin de favorecer la evolución de las heridas en la boca, Andrés Roca Rey se alimenta durante estos días a base de una dieta líquida.
Por otra parte, la cornada de dos trayectorias en el muslo izquierdo presenta un aspecto inmejorable apenas 48 horas después de la primera cirugía. Los doctores que revisaron la herida en el citado centro hospitalario afirmaron que la cornada ha estado muy cerca de producir destrozos en el intestino delgado y el ano, pero que por fortuna no afectó a músculos ni vasos sanguíneos importantes.
El propio Roca Rey se encuentra animado y contento de haber cosechado un triunfo tan importante en una plaza de máxima categoría en México como es la Nuevo Progreso de Guadalajara, y espera con ansia el poder volver a vestirse de luces para seguir cumpliendo con sus compromisos en esta ilusionante campaña americana. En el horizonte, el mano a mano con Enrique Ponce el día 29 de este mes en la plaza de su tierra, Acho (Lima).