Investigadores de la UJAT en la DAIA, impulsan proyectos para consolidar su aplicación en construcción, medicina y tratamiento de aguas
Las toneladas de desechos de las conchas de ostión tendrán un uso favorable para la sociedad en tres importantes rubros, la elaboración de materiales de construcción, en el campo de la medicina y para el tratamiento de aguas, todo ello mediante el empleo de la Nanotecnología, refirió la investigadora de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco (UJAT), Dra. Laura Lorena Díaz Flores.
La profesora adscrita a la División Académica de Ingeniería y Arquitectura (DAIA), dio a conocer que aunque la investigación “El uso de los desechos de conchas de ostión, en materiales de construcción, medicina y tratamiento de aguas”, todavía se encuentra en una fase experimental, ya es posible hablar de avances significativos, encaminados a la obtención de una patente que se encuentra en proceso de redacción.
El potencial de este proyecto se basa en el hecho de que el litoral de Tabasco es propicio para la producción del ostión para consumo alimenticio, y su concha es una especie de material inorgánico que cuando entra a la etapa de desecho se va acumulando en grandes cantidades en las superficies territoriales de las comunidades productoras.
Derivado de ello, agregó Díaz Flores, con el impulso de la nanotecnología en años recientes se ha podido establecer un proceso donde disminuyendo los tamaños de grano de cualquier material, podemos tener un material que tiene una aplicación diferente a la que inicialmente tenía, en este caso la concha de ostión molida puede tener varios usos.
Miembro del Sistema Nacional de Investigadores Nivel 1, la catedrática puntualizó que “cuando investigamos la composición de la concha de ostión encontramos que es un carbonato de calcio (CaC03), al cual si nosotros lo sometíamos a diferentes tratamientos térmicos, es decir calentarlo a altas temperaturas, este se convierte en oxido de calcio y si se le da un calentamiento mayor absorbe la humedad del aire y se transforma en un hidróxido de calcio. Investigando, la versatilidad de este material que por el simple hecho de someterlo a un tratamiento de calor, se puede obtener carbonato de calcio, óxido de calcio e hidróxido de calcio, de ahí fue que encontramos productos de carbonato de calcio de conchas de ostión que se comercializan como un suministro para la medicina”.
Otro proceso, explicó, fue que a través de trituraciones y moliendas se disminuyó el tamaño de partícula para utilizarlos en mezclas de arena, cemento y agua, que dio como resultado un cemento de alta resistencia y de baja permeabilidad al agua. Tema que se desarrolló en una tesis de investigación y encontramos que las mezclas de carbonato de calcio, agua, cemento y arena en diferentes proporciones mejoran la calidad del mortero final con apariencia más compacta e incrementan la resistencia a la compresión de este material.
Parte del trabajo fue determinar si estos polvos obtenidos absorbían algunos metales que puedan afectar estratos o mantos acuíferos susceptibles a la contaminación. Después de dos años de investigación, se llegó a la conclusión de que con el impulso de la nanotecnología, el proceso de remoción de metales pesados en soluciones acuosas o afluentes por técnicas de adsorción utilizando nanopartículas de CaCO3 obtenidas de la molienda de desechos de conchas de ostión es más útil y eficiente.