Su nombre es Allodaposuchus hulki y convivió con los últimos dinosaurios del Pirineo.

Un equipo de investigadores del Instituto Catalán de Paleontología Miguel Crusafont y la Universidad de Barcelona (España) descubrió en 2003 (cerca de Orcau, Lérida) una nueva especie de cocodrilo antiguo. Ahora, el estudio y descripción detalladas de sus fósiles acaban de ser publicadas en la revista PeerJ.

El cocodrilo en cuestión ha sido bautizado como Allodaposuchus hulki en homenaje al personaje de Marvel, Hulk, ya que la complexión de este animal era tremebunda: una musculatura muy desarrollada con enorme fuerza en sus cortas extremidades. Este cocodrilo “Hulk” convivió durante el Cretácico con los últimos dinosaurios del Pirineo hace 69 millones de años y, según las investigaciones, “su masa muscular es muy superior incluso en comparación con otras especies del género Allodaposuchus”, explica Alejandro Blanco, coautor del estudio; lo que indica que su gran fuerza le permitía caminar con el cuerpo separado del suelo, en una postura semierguida.

Los paleontólogos han estudiado los restos del Allodaposuchus hulki, compuestos de diversas partes del cráneo, la columna vertebral, la cintura escapular y las extremidades anteriores de un mismo espécimen. Entre las conclusiones, destaca la presencia de unas aberturas óticas (orejas) muy amplias que gracias a imágenes radiográficas mediante tomografía computarizada, han podido desvelar que probablemente este animal tuviese un agudo sentido del oído.

El género al que pertenece este cocodrilo es uno de los grupos de crocodilianos más primitivos del mundo y tuvo su origen en la península ibérica. Se trataba de un animal de hábitos terrestres y con la suficiente capacidad para acometer largos viajes por los ambientes de ríos que presidían el paisaje de esta zona en aquella época.

Por Sarah Romero (Interesante.es)