¿Sabías que recordar cosas lindas son un buen antídoto para la depresión y el estrés?

Por ejemplo, pasar una tarde con tus viejos amigos compartiendo grandes recuerdos, podrían ser la medicina perfecta.

De acuerdo con una investigación de la Universidad de Rutger en Estados Unidos, confirmaron que además esto, ayuda a combatir el estrés, y a regular las emociones y así poder alejar la depresión.

Se sometió a un grupo de voluntarios a resonancias magnéticas y los investigadores notaron que rememorar un viejo y positivo recuerdo activaba el sistema de recompensa del cerebro con tanta intensidad como si el suceso fuera real.

Al recordar gratos momentos el cerebro liberaba dopamina lo que nos proporciona felicidad y sentimientos de euforia.

Eso sí, lo mejor de este tratamiento es que está al alcance de todos y no cuesta más que ¡Recordar!

Fuente: planetacurioso.com