El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, agradeció hoy al papa Francisco por su “inestimable apoyo” al “nuevo comienzo” entre su país y Cuba.
Obama dijo que el acercamiento entre ambos países ofrece la “promesa” de una mejor relación bilateral, mayor cooperación en el continente y “una vida mejor para el pueblo cubano“.
El mandatario también destacó el mensaje de Francisco de que hay que practicar la misericordia con los refugiados y los inmigrantes.
“Usted nos recuerda que ‘el mensaje más poderoso del Señor’ es la misericordia. Eso significa dar la bienvenida al extranjero con empatía y el corazón verdaderamente abierto”, dijo Obama en referencia a los refugiados y los inmigrantes, en un breve discurso durante la ceremonia oficial de bienvenida al pontífice en la Casa Blanca, a la que asisten unas 15 mil personas.
El presidente estadunidense recordó que el mensaje de misericordia del Pontífice, que llegó este martes a Washington procedente de Cuba, abarca desde “los refugiados que escapan de tierras en guerra, a los inmigrantes que dejan sus casas en busca de una vida mejor”.
“Significa que hay que enseñar compasión y amor por los marginados, a aquellos que sufren y a aquellos que buscan la redención”, aseguró Obama en un discurso cargado de referencia al mensaje de la Iglesia.
“Usted nos recuerda que a los ojos de Dios nuestra medida como individuos y como sociedad no está determinada por la riqueza, el poder o la celebridad, sino por lo bien que aplicamos el llamado de las Escrituras a elevar al pobre y al marginado”, añadió el mandatario.
Inmigrantes, sociedad justa y cambio climático, tópicos del Papa
Por su parte, el Papa dijo al presidente de Estados Unidos que se considera “hijo de una familia de inmigrantes” y que estos construyeron “en gran medida” este país en su discurso en la bienvenida oficial ofrecida en la Casa Blanca.
Francisco se calificó a sí mismo de “hermano” de Estados Unidos y adelantó que en su intervención el jueves ante el Congreso alentará a sus gobernantes a guiar al país “con fidelidad a sus principios fundadores”.
Francisco explicó a Obama que los católicos estadounidenses “están comprometidos en construir una sociedad verdaderamente tolerante e inclusiva, en la salvaguarda de los derechos de las personas y las comunidades y en el rechazo a cualquier forma de discriminación injusta”.
E indicó que están preocupados por el hecho de que, en sus “esfuerzos por construir una sociedad justa” queden respetadas sus “inquietudes más profundas y su derecho a la libertad religiosa”.
“Esa libertad es uno de los activos más valiosos de América”, afirmó el Papa, quien dijo coincidir con los obispos estadounidenses en la necesidad de permanecer vigilantes, justamente como buenos ciudadanos, para mantener y defender esa libertad de lo que pudiera amenazarla o comprometerla.
Además, elogió los esfuerzos hechos recientemente para “reparar las relaciones rotas” y “abrir nuevas puertas de cooperación” en la humanidad.
“Son pasos positivos en la vía de la reconciliación, la justicia y la libertad”, dijo Bergoglio.
Aunque el pontífice no citó casos concretos, hizo un llamamiento a “todos los hombres y mujeres de buena voluntad de esta gran nación” para que apoyen “los esfuerzos de la comunidad internacional para proteger a los vulnerables de nuestro mundo y estimular modelos de desarrollo integrales e inclusivos”.
A su vez, urgió hoy ante el presidente estadunidense a cambiar un “sistema” que excluye a millones de personas e instó a resolver el problema del cambio climático y no dejar su solución a las próximas generaciones.
El pontífice aseguró que vivimos “un momento crítico de la historia” en relación con lo que denominó la “casa común” y aseguró que “todavía hay tiempo” para alcanzar un “desarrollo sostenible e integral, porque sabemos que las cosas pueden cambiar”.
“Ese cambio requiere por nuestra parte un reconocimiento serio y responsable no solo de la clase de mundo que podemos estar dejando a nuestros hijos, sino de los millones de personas que viven bajo un sistema que les ha excluido”, agregó.
El Papa citó al histórico líder estadounidense Martin Luther King cuando recordó: “podemos decir que dejamos adeudado un pagaré y ahora ha llegado el momento de saldarlo”.
Estimó que la iniciativa de Obama de reducir la contaminación del aire es “alentadora” y citó la encíclica papal de la que es autor, Laudato si, al decir que “la humanidad todavía puede trabajar de manera conjunta para construir nuestra casa común”.
“Como cristianos inspirados por esta certidumbre, deseamos comprometernos con el cuidado consciente y responsable de nuestra casa común”, dijo Bergoglio.
Por El Excelsior