En el último trimestre de la administración nuñista, la Secretaría de Salud incurrió en desvío de recursos principalmente al interiorde los hospitales, afirmó la titular de la dependencia, Silvia Guillermina Roldán Fernández.
En entrevista, expuso que el dinero que estaba etiquetado para atender programas o servicios se ocupó para el pago del personal.
“Efectivamente, en el sexenio anterior hubo desvíos de recursos al interior de los hospitales y de la Secretaría de Salud en general,cosa que está siendo auditada por especialistas”,sostuvo.
Refirió que es la dependencia sanitaria la que más tardó en firmar le primer acta de entrega-recepción, “yo fui la que más tardó en firmar la primera acta, tuvimos que pedir tiempo, unas dos semanas más. En esto hay un grupo de auditores. Desde luego que sí hay desviaciones. En el último trimestre del año se tomó dinero que no se debía de tomar para pagar al personal, eso es gravísimo. Cuando llegue la auditoría, lo va a observar. También hay proveedores a los que no se les pagó. Usted no puede utilizar dinero de este año para pagar deudas del año anterior”,expuso.
Por lo anterior, dejó claro que se debe aplicar mano firme para que se dejen los vicios de corrupción dentro de la dependencia.
“Yo digo que nosotros tenemos que demostrar con hechos la honestidad. Hay que apegarnos a lo escrito. Los cinco directores de hospitales de alta especialidad elegidos, son personas formadas, que han trabajado mucho tiempo en los hospitales. Sobre el orden de los medicamentos, los directores están llevando perfectamente bien el control de qué sale y qué entra. Los responsables son los directores y las jefas de enfermeras. Ellos son los responsables”, mencionó.
Por lo anterior, Roldán Fernández manifestó que la dependencia a su cargo los problemas más graves que enfrenta son por la falta de orden y de presupuesto.
Un hospital de tercer nivel necesita 500 millones de pesos de gasto corriente diario, si le damos 200, ¿Cómo quiere que funcione? La parte más importante del sexenio pasado fue que hubo cuatro secretarios de Salud, ¿cómo poner orden cuando cada quien tiene una idea específica de lo que va a hacer?
Por el desorden, los nosocomios están operando sin recursos a los pacientes, entre estos casos, dijo en el Hospital de la Mujer registra 18 mil eventos al año; el Rovirosa, 24 mil;y el Juan Graham, 18 mil casos anuales, que se sobrecargan por no existir una buena coordinación con otras Secretarías como la de Seguridad, que podría ayudar a evitar accidentes.
En el tema de abasto de medicamentos, la secretaria de Salud expuso que se necesitará de seis meses para tener el abasto suficiente de medicinas para los tabasqueños, lamentando que por el desorden al interior dela Secretaría, muchos insumos se caducaron.
“Los dos primeros años hay que dedicarse a ordenar. La idea era fortalecer el primer nivel, pero tuvimos que empezar con medicamentos. Se va a tardar seis meses en los medicamentos, porque no todos los proveedores los tienen. Ya entramos en la compra consolidada a nivel nacional. En abril, necesitamos empezar a recibir medicamentos, hay algunos que no se hacen enMéxico. Los hospitales tenemos cubiertos cuatro meses. Hoy, en los hospitales de Alta Especialidad andamos en el 68 por ciento; en los de segundo nivel, un poquito más abajo; y en los de primer nivel, en el 66 por ciento de cobertura”,puntualizó,
Hospital Rovirosa se tendría que sustituir
Respecto a los hospitales, Silvia Roldán lamentó que no se le ha dado mantenimiento a los nosocomios del estado desde hace años, lo que ha ocasionado que el Hospital Rovirosa, tenga que ser sustituido en unos tres años.
“La Secretaría de Salud no tiene cultura de mantenimiento,y eso es gravísimo, porque todo se viene cayendo, y llega el momento en que ningún aparato sirve, que son estratégicos para el funcionamiento. Hay que verlos presupuestos de mantenimiento para la Secretaría que no alcanzan para nada.Los puntos débiles están, por ejemplo, en el acelerador lineal. El Rovirosa es un hospital que, a mediano plazo, seguramente se tiene que substituir”.
