El electorado de Estados Unidos, que elegirá a un nuevo presidente en noviembre del 2016, será el más racial y étnicamente diverso de la historia, gracias en parte a un aumento récord del número de hispanos elegible para votar.

Un nuevo estudio del Centro Pew concluyó que el casi uno de cada tres votantes (un 31 por ciento) elegible para votar el 8 de noviembre, será latino, negro o asiático, un aumento de 2.0 puntos porcentuales en relación con las elecciones de 2012.

“Una gran parte de este cambio se debe al fuerte crecimiento de los votantes hispanos elegibles, en particular los jóvenes nacidos en Estados Unidos”, señaló el análisis elaborado por Jens Manuel Krogstad.

En 2012, un total de 215 millones de estadunidenses eran elegibles para votar, una cifra que ascenderá a 225.7 millones de personas el 8 de noviembre del 2016, considerando a los nuevos ciudadanos, las naturalizaciones, los llegados de Puerto Rico, menos las personas fallecidas.

Los hispanos, que fueron 23.3 millones elegibles para votar en 2012, en las elecciones en que se reeligió al presidente Barack Obama, serán 27.3 millones en 2016, un aumento del 17 por ciento, el más alto de cualquier grupo étnico residente en Estados Unidos.

Por comparación los blancos serán 135 millones, los afroamericanos serán 27.4 millones, y los asiáticos 9.2, pero en ninguna de las tres categorías se registraron aumentos tan amplios de las personas elegibles para votar.

El Centro Pew señaló que los cambios de la población en edad de votar, es decir aquella nacida en este país o naturalizada mayor de 18 años, refleja el “profundo cambio” de las tendencias demográficas del país.

Aunque los blancos no hispanos representan aún la mayoría de personas elegibles, su crecimiento se ha quedado rezagado en comparación con todos los otros grupos raciales o étnicos del país.

Con un 2.0 por ciento de aumento, el crecimiento de los votantes elegibles blancos palidece frente al 6.0 por ciento de los afroamericanos, el 16 por ciento de los asiáticos o el 17 por ciento de los latinos.

Como resultado de los cambios demográficos, la proporción de votantes blancos no hispanos ha caído en un solo ciclo electoral presidencial del 71 por ciento en 2012 a 69 por ciento en 2016.

En el caso de los latinos, el Pew estimó en un estudio separado que podrían marcar un nuevo récord de votantes, pero su proporción podría ser menor a la de elecciones pasadas.

El electorado latino podría alcanzar un nuevo récord del 11.9 por ciento de todos los estadunidenses elegibles, con lo cual podrían tener un “impacto mayor” en el desenlace de las elecciones.

“Sin embargo, por muchas razones, es probable que una vez más los electores latinos queden sub representados en 2016 comparado con su proporción de votantes elegibles o su proporción de la población nacional”, señaló ese análisis elaborado por Hugo Marc López.

En 2012, sólo un 48 por ciento de los latinos elegibles para votar (11.2 millones) acudieron a las urnas, comparado con 64.1 de los blancos unidades 66.6 por ciento de los afro americanos. La cifra marcó un récord frente a los 9.7 millones del 2008, cuando Barack Obama fue electo.

Para el 2014, en las elecciones intermedias, donde históricamente la afluencia de votantes es menor que a las elecciones presidenciales, la proporción fue del 27 por ciento, la proporción más baja desde que existen registros de voto.

Aunque se estima que el número de latinos podría superar los 13 millones de votantes en 2016, el rápido crecimiento de los latinos elegibles para votar podría resultar en una proporción de votantes inferior al promedio para elecciones presidenciales.

Se estima que cada año, un total de 803 mil latinos se convierten en personas elegibles para votar.

Fuente: Notimex/doh/Foto: archivo