La sonda espacial Juno está apunto de descubrir, en los próximos 18 meses que dure su misión, los enigmas de Júpiter, al colocarse de manera exitosa en su órbita tras casi cinco años de viaje y un costo de mil 100 millones de dólares.

La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) de Estados Unidos informó que la sonda Juno llegó a su destino final, al colocarse de manera exitosa en la órbita de Júpiter tras un periplo que inició con su lanzamiento el 5 de agosto de 2011 desde la base de la Fuerza Aérea de Cabo Cañaveral, en Florida, Estados Unidos.

La NASA recibió este lunes una señal de Juno a las 20:53 horas locales (04:45 GMT del martes), que anunció el final de una complicada maniobra de 35 minutos, en la que quemó combustible para frenar y quedar en la órbita deseada alrededor de Júpiter.

Al recibirse la señal, la alegría se desbordó en el centro de operaciones de la misión en el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA, en Pasadena, California.

La puesta en órbita sobre el mayor plantea del Sistema Solar se consumó tras una maniobra que consumió 35 minutos, y que incluyó el frenado hacia abajo de los motores, con el propósito de que la sonda fuera aspirada por la órbita.

Juno es la segunda sonda espacial colocada en órbita alrededor de Júpiter, el planeta más grande del Sistema Solar, luego de que la nave Galileo de la NASA pasó ocho años recabando datos sobre la topografía del planeta y sus numerosas lunas.

Sin embargo, Galileo carecía de las herramientas y de la tecnología con que cuenta Juno para tratar de determinar lo que se encuentra debajo de las extensas capas de nubes de gases que cubren a Júpiter.

Los astrónomos creen que Júpiter pudo haber sido el primer planeta que se formó, y se cree que tiene las claves para entender los orígenes de nuestro sistema solar.

La información permitirá precisar la cantidad de agua que contiene y confirmar o refutar la posible presencia de un núcleo rocoso, lo que podría revelar cuando se formó Júpiter y proporcionar pistas sobre la formación de otros planetas.

La nave Juno deberá permanecer durante un año en la órbita de Júpiter, a fin de estudiar cómo se formó este planeta, así como indagar el origen de elementos críticos como helio e hidrógeno, y compuestos como agua y metano.

Se espera información esencial para saber cómo se formó la Tierra, el Sistema Solar e incluso la vida en la forma como la conocemos, indicaron los expertos de la NASA.

Datos de Júpiter:

Júpiter es 11 veces más ancho que la Tierra y 300 veces más masivo.

Un año en Júpiter son 12 años de la Tierra, pero un día de ese planeta son 10 horas en el nuestro.

Bajo presión, el hidrógeno se convierte en un fluido conductor de electricidad.

Este hidrógeno metálico puede ser la fuente del campo magnético.

La mayor parte de las nubes en la parte de arriba tienen amoníaco y ácido sulfhídrico.

Las rayas de Júpiter fueron creadas por fuertes vientos que van de este a oeste.

La Gran Mancha Roja es un torbellino de una tormenta gigante que es dos veces el ancho de la Tierra.

La conquista de Júpiter inicio este lunes con la inserción de Juno a la órbita, en una elíptica grande que le llevará 53 días en completar.

A mediados de octubre habrá una segunda “frenada” para reducir la órbita a 14 días.

Durante las 37 órbitas que llevará a cabo en total, Juno no pasará en ningún momento por la sombra de Júpiter, una medida necesaria para evitar una pérdida de potencia eléctrica y un contraste excesivo en las temperaturas. En principio cada órbita debería ser idéntica a la anterior, pero Júpiter no es una esfera perfecta y está achatado por los polos. Esto provoca una precesión de la órbita, es decir, Juno pasará cerca de Júpiter en una posición distinta en cada ocasión.

Es aquí cuando realmente empezará a descubrir los secretos del gigante.

La misión Juno terminará el 20 de febrero de 2018, cuando se espera que la sonda se estrelle contra Júpiter.

Lockheed Martin Space Systems en Denver construyó la sonda espacial.