La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, se reunió en Varsovia con las autoridades polacas como parte de la gira que la llevará también a Rumanía, con el propósito de demostrar el “apoyo” al flanco oriental de la OTAN ante la invasión rusa y anunció que se enviarán 50.000 millones de dólares a Ucrania, así como ayuda militar a Polonia.
Como prueba de ese “compromiso” para con Ucrania y sus aliados occidentales, Harris anunció que su Gobierno entregará 50.000 millones de dólares a Ucrania a través del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas y confirmó el despliegue de dos baterías de sistemas antimisiles Patriot en territorio polaco.
Tras entrevistarse con el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, y con el presidente Andrzej Duda, Kamala Harris compareció en una rueda de prensa junto a este último y agradeció a Varsovia su disposición a ayudar a “un millón de refugiados ucranianos”.
Según fuentes oficiales polacas, más de 1.43 millones de personas llegaron huyendo de Ucrania desde que comenzó la guerra el pasado 24 de febrero, y Harris se refirió al “extraordinario trabajo” llevado a cabo “por la gente normal”, en un país al que “el mundo está mirando”.
En este sentido, recordó que la Cámara de Representantes de EEUU aprobó un paquete de ayuda económica a Ucrania por valor de más de 13.600 millones de euros, de los cuales la mitad serán destinados a asistencia directa a los refugiados y compensaciones a los países que les acojan.
Kamala Harris destacó además que el objetivo de la visita es “confirmar el compromiso de Estados Unidos con Polonia y sus aliados de la OTAN” y subrayar la postura común de los aliados occidentales con respecto a las ayudas a Ucrania y las sanciones económicas a Rusia.